miércoles, 13 de junio de 2012




1.1           
ANALISIS DE LA SITUACION PROBLEMATICA:

Junto con los grandes avances de la ciencia y la tecnología, a la actual generación se nos presenta un problema que aunque imperceptible es en realidad muy grave y vistoso pues a medida el tiempo pasa nos vamos olvidando de como fue que todo lo que ahora nos ayuda en la profesión como arquitectos o ingenieros, poco a poco fue evolucionando desde los planos con tinta hasta las presentaciones de proyectos a través de programas como AutoCad, Sketchup o 3DMax que nos permiten modelar nuestros proyectos tan similares a la realidad.




1.2   ENUNCIADO DE LA INVESTIGACION: La Arquitectura en Informática. En este apartado analizamos la relación que se puede establecer entre la arquitectura y la herramienta informática. Primero conoceremos la labor del arquitecto. Posteriormente analizaremos la evolución hasta el momento actual del uso que de la informática ha hecho el arquitecto.


2.       JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN: Darnos cuenta por medio de la investigación que cómo ha medida del tiempo ha ido evolucionando la arquitectura hasta llegar el día de ahora.


3.0.         OBJETIVOS DE LA INVESTIGACION:


3.1OBJETIVOS GENERALES:                                                                                                           Investigar historia y evolución de la Arquitectura.


3.2.  OBJETIVOS ESPECIFICOS:
       Analizar cuáles son los factores que ha hecho que la Arquitectura evolucione.
       Identificar cuáles son las herramientas que utilizaban nuestros antepasados Arquitectos y como a medida del tiempo ha ido evolucionando.


4.0.         ALCANCES Y LIMITACIONES DE LA INVESTIGACION:

ALCANCES


. Como se desempeña la labor del arquitecto.
. Explorar la necesidad de ir evolucionando.


LIMITACIONES:
. Antecedentes históricos.
. Fecha exacta de cómo inicio y evoluciona la arquitectura en informática.


5.0.         MARCO TEÓRICO:


La labor del arquitecto es el diseño de una idea arquitectónica, su transformación en un proyecto ejecutable, la comunicación de este proyecto a unos agentes de la construcción y el control de la correcta ejecución de esa idea en un espacio arquitectónico habitable.
Federico Zuccari [1607] en su libro “L’idea de’scultori, pittori e architetti” concebía el diseño arquitectónico como un ente formado por dos partes: el diseño interno y el diseño externo. El diseño interno es la idea que el artista tiene en su mente y que debe comunicar al mundo. El diseño externo es el dibujo o representación gráfica, la forma concreta en la que se traducen las ideas anteriores.
En el proceso constructivo, gran parte del trabajo del arquitecto consiste en transformar sus concepciones arquitectónicas tridimensionales, residentes en su mente, en documentos gráficos, llamados planos, que permitan a otros agentes de la construcción interpretarlos para hacer realidad las ideas espaciales que estos planos representan.
La labor del arquitecto es el diseño para la construcción de un edificio [Port 1989]. Port entiende que la palabra diseño denota un proceso. Esto incluye determinar una situación y concebir una solución, analizar y desarrollar un proyecto muy detallado, y producir de la adecuad a documentación. Resume este proceso en:
- Concepción de las ideas de diseño.
- Almacenaje de estas ideas.
- Concreción de la propuesta (visualización, análisis, costos…).
- Comunicación de las ideas.
El proceso de generación de ideas arquitectónicas y su posterior representación gráfica con el fin de comunicar el proyecto a quienes deben construir el edificio está sufriendo una transformación como consecuencia de la aparición de la informática aplicada a la arquitectura [Angulo 1995].


 La informática y la práctica profesional


Podemos encontrar dos posiciones opuestas. Por un lado la que convierte la informática en un mito y que trata de convencer al arquitecto de que los resultados se obtienen sin más que pulsar un botón. Por otro la que considera el computador como un tabú, que anula la creatividad y la capacidad de decisión más elemental. Una vez más la virtud puede estar en un término medio.
Al analizar el estado de la cuestión del uso del CAD en la arquitectura, diferentes autores insisten en la posibilidad de evolucionar en los sistemas productivos utilizando sistemas de diseño asistido por computador [Port 1989] [Feijó 1992] [Sainz y Valderrama 1992]. Descubren que existe una fuerte reticencia por parte de quienes deben tomar la decisión económica de adquirir equipos informático. El motivo más comentado es la falta de un conocimiento real de cómo llevar a cabo, usar y controlar esta tecnología. Estos autores piensan que la tecnología actualmente es adecuada.
Analizan el proceso de diseño y proponen métodos para que la gente pueda proyectar de un modo más efectivo con la ayuda de los computadores. Detrás de los planteamientos teóricos de muchos autores se halla la reflexión sobre cuáles son las aportaciones que la informática realiza al arquitecto, tanto en su formación como en el desarrollo de su labor profesional.
Para Port, tanto los arquitectos como los urbanistas realizan un esfuerzo creativo y un juicio humano que de ningún modo pueden ser realizados por el computador. Sin embargo el procesamiento de la información es una parte importante de la labor del proyectista, y la nueva “máquina-herramienta” pueda ayudar en la mecanización de esta tarea.
Esta utilización de los computadores coincide con Garrido[1989] Cuando una tecnología comienza a tener un fuerte impacto en los modos de trabajo, de ella se deben conocer:
a. Las posibilidades que ofrece.
b. Las limitaciones que posee
c. Cómo adaptarla, usarla y controlarla para obtener los mejores resultados.
En el caso del CAD, es el momento de rediseñar las propias organizaciones, creando o adaptando estructuras donde éste tenga cabida. Se deben adquirir conocimientos de CAD y evolucionar en los métodos.
Para Sainz y Valderrama [1992] es incuestionable que el computador ha entrado en los estudios de arquitectura, y ha modificado los métodos de trabajo del arquitecto. Este cambio en el modo de proyectar y de representar la arquitectura para su posterior edificación es un factor decisivo para el arquitecto de este final de siglo. Según estos autores ésta es una realidad incontestable que los profesionales han de aceptar irremisiblemente. Esta transformación se debe a la aplicación de los desarrollos tecnológicos a una profesión hasta hace muy pocos años prácticamente artesanal.
Para estos dos autores casi todos los arquitectos consideran adecuado utilizar el computador para labores pesadas y repetitivas que en muchas ocasiones son realizadas por otros técnicos (memorias, pliegos de condiciones, presupuestos, cálculo de estructuras e instalaciones). Pero son pocos los que ven con entusiasmo la posibilidad de concebir y diseñar sus proyectos desde el primer momento delante de una pantalla, en lugar de hacerlo ante su tablero de dibujo.
Para Feijó [1992] el profesional de la arquitectura debe adentrarse en el mundo de la informática y aprovechar la alta eficacia en las tareas de materialización de los proyectos de arquitectura. Sin embargo advierte sobre el peligro de pensar que sea la panacea de la arquitectura, ni que vaya a sustituir al arquitecto. Afirma que es una potente herramienta al alcance de aquellos que no quieren perder el tren del progreso.
Según Fargas [Fargas et al 1993] el uso de las nuevas tecnologías intervendrán en el modo de proyectar, en la misma génesis del proyecto. La concepción del estudio de arquitecto se verá modificada. surgiendo nuevas situaciones desconocidas hasta ahora como es el triángulo de diseño (ver figura 2.7). Tradicionalmente el arquitecto se enfrentaba personalmente al proyecto y personalmente conocía todas las herramientas para ejecutarlo, aunque la labor del delineado final fuese realizada por otros profesionales con plumillas o un programa de CAD 2D. Sin embargo cuando el propio proceso de diseño desde su génesis se realiza con un sistema CAD si el arquitecto no conoce adecuadamente la herramienta informática requiere de la presencia constante de un especialista en CAD que trabaje con el sistema. En una situación extrema nos encontraríamos que el arquitecto sería la cabeza pero no las manos.
Para algunos arquitectos supone una transformación de su forma de trabajar, para otros más jóvenes es el modo de entrar en el mundo profesional. Sin embargo muchos arquitectos piensan que no se hallan capacitados para “subirse al tren” del trabajo informatizado, fundamentalmente porque supone un cambio radical en el método de trabajo. Según Lizón [1991] existen tres categorías de arquitectos en relación a la utilización de la informática:
- El que se está introduciendo o no ha llegado a hacerlo.
- El que ya ha llegado a utilizar los sistemas de CAD para desarrollo de sus proyectos, pero mantiene una insatisfacción respecto al método a emplear.
- El que ya ha asumido el proceso de CAD como una herramienta más y está preocupándose de las nuevas herramientas que ayudan a comunicar su idea. Estos se encuentran con las posibilidades de los sistemas multimedia y todos los híbridos de su generación (imagen sintética, infografía, digitalización de imágenes, animática…)


 Herramientas de automatización al servicio del arquitecto.


Unas adecuadas herramientas de automatización facilitarán el desarrollo de las tareas. Asegurarán la efectividad y eficiencia en alcanzar los logros previstos. La elección se realizará según consideraciones que tengan en cuenta el software, los sistemas operativos y el hardware [Shih 1993]. Shih plantea una relación de herramientas de automatización. Esta lista corresponde a diferentes tareas que el computador puede realizar en apoyo de la labor del arquitecto.


 Herramientas de automatización [Feijó 1992]


Podemos llegar a la conclusión de que existe un amplio de actividades arquitectónicas donde la informática puede ser un medio adecuado para realizar las tareas que tradicionalmente se han realizado con otros medios. No queremos ahondar en el análisis de la oportunidad y eficacia de las aplicaciones informáticas concretas que en cada uno de estos campos existen. Sería una labor muy interesante analizar la eficacia de cada uno de estos programas pero escapa de los límites de esta investigación.
A continuación hacemos un reflexión sobre la posibilidad de automatizar los siguientes procesos arquitectónicos:
- La génesis del proyecto.
- La generación de documentos de proyecto.
- La comunicación del proyecto
- El control de ejecución del proyecto


 La génesis del proyecto.


La reflexión sobre si los computadores sonadecuados herramientas en la génesis del proyecto es el problema fundamental que subyace en muchas discusiones sobre si las máquinas únicamente sirven como herramientas para dibujar o son elementos útiles en el proceso de diseño. Esta reflexión es importante para tomar una adecuada postura en relación al papel de los ordenadores en la enseñanza de las asignaturas de proyectos.
Siguiendo el planteamiento de Federico Zuccari consideramos el diseño como un proceso que va desde dentro hacia afuera. El diseño surge en la mente del arquitecto y posteriormente abandona al creador y se plasma en una concreta representación gráfica. El diseño interno puede ser considerado como la fase de proyecto de arquitectura. El diseño externo podemos considerarlo como el dibujo de la arquitectura. No es objeto de esta investigación discernir el límite entre ideación y representación de la arquitectura. Asumimos que nuestro planteamiento simplifica excesivamente el proceso creativo de la arquitectura. Esta simplificación nos permite una primera aproximación al papel de la informática en el trabajo arquitectónico.
En el mercado de software de aplicación para el diseño arquitectónico(CAAD, “Computer Aided Architectural Design”) podemos distinguir varias categorías, aunque muchos programas dispongan de capacidades de varios de estos niveles:
- Representación en 2 dimensiones.
- Representación en 3 dimensiones.
Siguiendo a Zuccari podemos pensar que todas estas herramientas trabajan en el diseño exterior. Esta es la situación en la que se encuentra el computador para muchos arquitectos y profesores de arquitectura. Una vez concebido el proyecto en la mente del arquitecto, y sólo entonces, la informática puede asistir a la arquitectura para hacerse patente a los agentes de la construcción y poder llegar a edificarse
Así se expresa Pozo [1993] cuando critica la introducción en los nuevos planes de estudio para arquitectura de una nueva materia que se llamaría “diseño asistido por computador”. Esta actitud es propia del profesor de arquitectura que cree que la informática únicamente sirve para producir los planos de arquitectura una vez que ésta se halla en la mente del arquitecto. Por tanto nos encontraríamos en un proceso externo del diseño. Este planteamiento ha sido común mientras las capacidades de los programas informáticos se limitaban a ser unos delineantes cualificados. El computador se entendía como un medio para exclusivamente representar arquitectura, en planos bidimensionales o en maquetas digitales tridimensionales. Podíamos hablar exclusivamente de dibujo asistido por computador
Sin embargo Madrazo [1992] expone caminos para utilizar el computador como una herramienta de composición tridimensional con lo que busca asociar el computador a las necesidades y al lenguaje de la arquitectura. Sus planteamientos suponen un camino para lograr una comprensión del espacio, para ensayar sobre la generación de las formas. Se trataría en definitiva de lograr una idea arquitectónica. Es decir, los mismos programas informáticos antes descritos constituyen herramientas para ayudar a imaginar y a expresar. Constituyen no sólo herramientas para representar arquitectura sino para concebir arquitectura. En este caso nos hallaríamos ante una herramienta propia del diseño interno. Estos planteamientos han sido posibles a partir del momento en que los programas de dibujo en 3 dimensiones han comenzado a ser extendidos y utilizados. En este momento podemos hablar de proyecto asistido por computador.
De idéntica forma se expresa Aparicio [1991]. El arquitecto debe predecir cuál será la realidad de lo diseñado y proyectado. Se trata de predecir, prever, pronosticar, simular mediante el proceso de diseño, cómo será la obra proyectada. Estas predicciones pueden ser desacertadas y por tanto, será necesario corregir una y otra vez. Estas correcciones deben realizarse a nivel de proyecto. Para ello existen herramientas cada día más eficientes que ayudan a predecir la realidad del diseño. Se trata de los programas de proyecto asistido por computador. Estas simulaciones con computador son más completas, flexibles y económicas que los modelos geométricos o maquetas. Permiten además introducirse en el interior del elemento diseñado y si es necesario modificarlo. Con el computador es posible técnica y económicamente diseñar la obra arquitectónica en todos sus detalles. La informática, los sistemas CAD, son herramientas no sólo convenientes sino necesarias en el mundo en que vivimos y con las capacidades y precios que la tecnología ofrece.
En nuestra opinión la discusión sobre si el ordenador es una adecuada herramienta para la génesis del proyecto parte del conocimiento parcial que algunos arquitectos tienen de la herramienta informática. Es evidente que existen dos puntos de vistas diferentes , y a veces antagónicos, sobre la oportunidad y eficacia del uso de los computadores en la génesis del proyecto. Esta oposición se traslada literalmente al campo de la docencia, donde podemos encontrar opiniones en ambos sentidos.


 La generación de documentos de proyecto


Toda tarea realizada por el computador es un proceso automatizado [Shih 1993], [Feijó 1992]. Sin embargo el control que el arquitecto impone sobre estos procesos no es el mismo en todos los casos.
El arquitecto impone un continuo control y análisis sobre todas los pasos que efectúa en la utilización de un programa de CAD. Cada una de las decisiones de dibujo, cada modificación de un objeto en la pantalla supone un cambio en el proyecto que el arquitecto analiza puntualmente. Algunos programas de CAD facilitan al arquitecto toda la información necesaria para ayudarle en cada decisión que vaya tomando. Es el caso de los programas de CAD integrado.

Otro tipo de tareas del proceso del proyecto arquitectónico son más susceptibles de ser automatizadas en su conjunto. El arquitecto confía en la bondad del programa escogido y confía en los resultados obtenidos por parte del computador. No efectúa un control continuo sobre cada paso que el programa ofrece. Los resultados del programa deberá ser contrastado con el buen sentido común que debe acompañar a todo arquitecto. Son programas de cálculo de estructuras, de cálculo de instalaciones o de mediciones y presupuestos.
En general podemos afirmar sin temor a equivocarnos que casi todas las actividades propias de un estudio de arquitectura pueden ser realizadas con los computadores: los planos, las memorias, los anejos de cálculo (estructuras, instalaciones…), las mediciones y presupuestos, los pliegos de prescripciones generales y particulares…
Los bancos de datos de arquitectura, los bancos de precios editados por diferentes instituciones y las múltiples posibilidades de acceso a la información a través de las redes telemáticas abren un campo de actuación para los arquitectos sin menoscabo de ninguna actividad que tradicionalmente realizase en su estudio.

 La comunicación del proyecto
La utilización de planos bidimensionales ha sido la forma tradicional que el arquitecto ha utilizado en la comunicación de su proyecto. En ocasiones el arquitecto necesita transmitir sus ideas a personas que carecen de visión espacial y que no consiguen interpretar una arquitectura reflejada en un plano bidimensional. Es un experiencia cotidiana que la comprensión de los planos arquitectónicos por parte de quienes no están iniciados resulta difícil. Hasta ahora las perspectivas manuales y las maquetas físicas eran medios al alcance del arquitecto para salvar esta dificultad y lograr la comunicación deseada.
Los programas de generación de imágenes foto realísticas, de generación de animaciones, y de realidad virtual abren una nueva etapa en el diseño exterior del proyecto arquitectónico [Fernández y Bustinza 1992b]. Con un coste de tiempo razonable se pueden lograr perspectivas fotos realísticas, animaciones, e incluso inmersiones multisensoriales en espacios virtuales donde la arquitectura imaginada por el arquitecto se hace evidente para el no iniciado. La modelación digital de los proyectos arquitectónicos permite una participación de más agentes en el proceso proyectual. En el momento en que el cliente es capaz de entender la arquitectura que se le propone podrá dar su opinión con un mayor conocimiento.
La evolución de los programas existentes en el mercado de los computadores personales hace que podamos decir que la comunicación de un proyecto a través de un sistema de realidad virtual (sin inmersión multisensorial) es posible. Es evidente el salto cualitativo que supone para un cliente ver su proyecto en un plano o caminar a través de él .


 El control de ejecución del proyecto


Las telecomunicaciones de banda ancha, como infraestructura de comunicación digital integrada de voz y datos permiten una forma de trabajar que abarca el importante volumen existente hoy día en la transferencia de información adecuada para hacer posible la oferta de servicios multimedia, videotelefonía, videoconferencia o trabajo de ingeniería concurrente.
Durante el proceso constructivo no pocas de las visitas de obra podrían evitarse si se dispusiera de un acceso rápido y directo a la obra. Esto es posible a través de la utilización de herramientas multimedia. Estas pueden, por un lado, minimizar el número de viajes, y por otro, permitir que un director de proyecto coordine un mayor número de proyectos simultáneamente. Dicha herramienta le permite integrar en su puesto de trabajo una cámara de video, un moden fax, un teléfono, correo electrónico o la conexión remota con otro computador [Camps 1995].


 El hiperproyecto: Un sistema hipermedia integrado


Uno de los tópicos informáticos de los últimos años ha sido el de los proyectos sin papel, el hiperproyecto, como una nueva forma de comunicación. Una implantación trivial de esta suposición no parece inmediata. Sin embargo, sí parece razonable que determinados documentos de proyecto puedan adquirir nuevas formas distintas de las actuales [Fernández y Bustinza 1994]. Así las memorias y los pliegos de condiciones pueden adquirir la forma de sistemas hipermedia interactivos y desempeñar un papel más activo en la transmisión del proyecto, como complemento de los planos.
La utilización de aplicaciones basadas en el uso de las telecomunicaciones permiten la mejora en los flujos de comunicaciones interpersonales de los diferentes participantes en un proyecto de construcción a través de servicios como:
- Videotelefonía
- Transferencia rápida de ficheros
- Acceso compartido de aplicaciones
- Acceso controlado a bases de datos
- Observación remota mediante el uso del video.
Es posible integrar el acceso y uso de toda la documentación generada por cada uno de los participantes en la obra.


5. 1 ANTECEDENTES HISTORICOS.


Antigüedad


Pirámides egipcias
A medida que las comunidades humanas evolucionaban y aumentaban, presionadas por las amenazas bélicas constantes, la primera modalidad arquitectónica en desarrollarse fue esencialmente la militar. En ese periodo surgieron las primeras ciudades cuya configuración estaba limitada por la existencia de murallas y por la protección de amenazas exteriores.
La segunda tipología desarrollada fue la arquitectura religiosa. La humanidad se confrontaba con un mundo poblado de dioses vivos, geniosdemonios: un mundo que aún no conocía ninguna objetividad científica. El modo en que los individuos lidiaban con la transformación de su ambiente inmediato estaba por entonces muy influenciado por las creencias religiosas. Muchos aspectos de la vida cotidiana estaban basados el respeto o en la adoración a lo divino y lo sobrenatural. El poder divino, por lo tanto, era equivalente (o aún superaba) el poder secular, haciendo que los principales edificios dentro de las ciudades fueran los palacios y los templos. Esta importancia de los edificios hacía que la figura del arquitecto estuviera asociada a los sacerdotes (como en el Antiguo Egipto) o a los propios gobernantes y que la ejecución fuera acompañada por diversos rituales que simbolizaban el contacto del hombre con lo divino.
Las ciudades marcaban una interrupción de la naturaleza salvaje, eran consideradas un espacio sagrado en medio del espacio natural. De la misma forma, los templos dentro de las ciudades marcaban la vida de los dioses en medio del ambiente humano.
Las necesidades de infraestructura de aquellas primeras ciudades también hicieron necesario el progreso técnico de las obras de ingeniería.


Antigüedad clásica


Templo de Hefesto en Atenas: arquitectura clásica griega
La arquitectura y el urbanismo practicados por los griegos y romanos se distinguía claramente de la de los egipcios y babilonios en la medida en que la vida civil pasaba a tener más importancia. La ciudad se convierte en el elemento principal de la vida política y social de estos pueblos: los griegos se desarrollaron en ciudades estado y el Imperio romano surgió de una única ciudad. El arquitecto griegoHipódamo de Mileto es considerado el primer urbanista de la historia. El ejemplo más conocido de este tipo de arquitectura corresponde aApolodoro de Damasco.
Durante los periodos y civilizaciones anteriores, los asuntos religiosos eran ellos mismos el motivo y el mantenimiento del orden establecido; en el periodo grecorromano el misterio religioso traspasó los límites del templo-palacio y se hizo asunto de los ciudadanos (o de la polis): surge ahí la palabra política, absolutamente relacionada a la idea de ciudad.
Mientras los pueblos anteriores desarrollaron sólo las arquitecturas militar, religiosa y residencial, los griegos y romanos fueron responsables del desarrollo de espacios propios a la manifestación ciudadana y de los quehaceres cotidianos: el ágora griega se definía como un gran espacio libre público destinado a la realización de asambleas, rodeado por templos, mercados y edificios públicos. Elespacio del ágora se convirtió en un símbolo de la nueva visión de mundo, que incluía el respeto a los intereses comunes, e incentivador del debate entre ciudadanos, en lugar del antiguo orden despótico.
Los asuntos religiosos aún poseían un papel fundamental en la vida mundana, pero ahora fueron incorporados a los espacios públicos de la pólis. Los rituales populares eran realizados en espacios construidos para tal fin, en especial la acrópolis. Cada lugar poseía su propia naturaleza (Genius Locci), insertados en un mundo que convivía con el mito: los templos pasaron a ser construidos en la cima de las colinas (creando un marco visual en la ciudad baja y posibilitando un refugio a la población en tiempos de guerra) para estar más cerca de los cielos.


Prehistoria




Durante la prehistoria surgen los primeros monumentos y el hombre comienza a dominar la técnica de trabajar la piedra.
El surgimiento de la arquitectura está asociado a la idea de abrigo. El abrigo, como construcción predominante en las sociedades primitivas, será el elemento principal de la organización espacial de diversos pueblos. Este tipo de construcción puede ser observado aún en sociedades no integradas totalmente a la civilización occidental, tal como los pueblos amerindios, africanos y aborígenes, entre otros. La presencia del concepto de abrigo en el inconsciente colectivo de estos pueblos es tan fuerte que marcará la cultura de diversas sociedades posteriores: varios teóricos de la arquitectura en momentos diversos de la historia (Vitruvio en la antigüedad, Leon Battista Alberti en el Renacimiento, y Joseph Rykwert más recientemente) evocaron el mito de la cabaña primitiva. Este mito, con variantes según la fuente, postula que el ser humano recibió de los dioses la sabiduría para la construcción de su abrigo, configurado como una construcción de madera compuesta por cuatro paredes y un tejado de dos aguas.

5.  2  BASE TEORICA.

La informática en la arquitectura



2.2 La informática en la arquitectura En este apartado analizamos la relación que se puede establecer entre la arquitectura y la herramienta informática. Primero conoceremos la labor del arquitecto. Posteriormente analizaremos la evolución hasta el momento actual del uso que de la informática ha hecho el arquitecto. En estas consideraciones se fundamenta la necesidad de integrar la informática en la práctica profesional del arquitecto.

En la segunda parte veremos qué campos de aplicación de la informática son posibles en nuestra profesión. Analizaremos esta aplicación en la génesis del proyecto, la generación de los documentos del proyecto, la comunicación del proyecto y la ejecución del proyecto. Terminaremos planteando la posibilidad de disponer toda la información del proyecto centralizada en un hiperproyecto.



2.2.1 La informática en la profesión del arquitecto


2.2.1.1 La labor profesional del arquitecto

La labor del arquitecto es el diseño de una idea arquitectónica, su transformación en un proyecto ejecutable, la comunicación de este proyecto a unos agentes de la construcción y el control de la correcta ejecución de esa idea en un espacio arquitectónico habitable.
Federico Zuccari [1607] en su libro “L’idea de’scultori, pittori e architetti” concebía el diseño arquitectónico como un ente formado por dos partes: el diseño interno y el diseño externo. El diseño interno es la idea que el artista tiene en su mente y que debe comunicar al mundo. El diseño externo es el dibujo o representación gráfica, la forma concreta en la que se traducen las ideas anteriores.
En el proceso constructivo, gran parte del trabajo del arquitecto consiste en transformar sus concepciones arquitectónicas tridimensionales, residentes en su mente, en documentos gráficos, llamados planos, que permitan a otros agentes de la construcción interpretarlos para hacer realidad las ideas espaciales que estos planos representan.
La labor del arquitecto es el diseño para la construcción de un edificio [Port 1989]. Port entiende que la palabra diseño denota un proceso. Esto incluye determinar una situación y concebir una solución, analizar y desarrollar un proyecto muy detallado, y producir de la adecuad a documentación. Resume este proceso en:
- Concepción de las ideas de diseño.
- Almacenaje de estas ideas.
- Concreción de la propuesta (visualización, análisis, costos…).
- Comunicación de las ideas.
El proceso de generación de ideas arquitectónicas y su posterior representación gráfica con el fin de comunicar el proyecto a quienes deben construir el edificio está sufriendo una transformación como consecuencia de la aparición de la informática aplicada a la arquitectura [Angulo 1995].

2.2.1.2 Breve historia del CAD

En 1962 Ivan Sutherland escribió en el Massachusetts Institute of Technology (MIT) el primer programa de computador capaz de dibujar una línea en una pantalla de rayos catódico. Había nacido el CAD o “Computer Aided Design”.
Las primeras aplicaciones del computador en la arquitectura no pertenecieron al campo gráfico[Sainz y Valderrama 1992]. Se centraron en la solución de problemas de tipo compositivo a partir de la potencia de cálculo del computador. Arquitectos como Christopher Alexander pensaron que determinando todos los parámetros de una situación compleja, e introduciéndoles adecuadamente al computador éste encontraría la solución óptima y más económica [Alexander 1964].
Estos planteamientos optimistas eran desproporcionados con las posibilidades concretas de los computadores de aquella época, y posiblemente erróneas en su concepción. El cambio social-económico-político de la situación mundial a mediados de los años setenta acabó con estos entusiasmos. Dejó una cierta sensación de desilusión sobre la verdadera capacidad de los computadores. Esta sensación arraigó con fuerza entre los arquitectos.
Las capacidades gráficas de los computadores aumentaron. Al principio se consideró como una unidad el computador, el sistema operativo y el conjunto de programas o aplicaciones. Una misma empresa desarrollaba, instalaba y mantenía las tres cosas, dando lugar a una filosofía de ventas de gran éxito que se llamaba “sistemas llave en mano”. Este método vinculaba para siempre a los clientes con un único fabricante. El costo de estos sistemas era excesivo para una implantación generalizada en los estudios de arquitectura. Los arquitectos no entraban dentro del abanico de clientes de estos fabricantes. Sólo el diseño dedicado a la producción industrial era atendido por estas empresas.
Los primeros sistemas gráficos eran de carácter general. La informática gráfica para arquitectura fue un derivado de los desarrollos pensados para otros campos de actividad o una adaptación de programas genéricos de dibujo plano o de diseño en tres dimensiones.
El uso de programas genéricos se hacía cada vez más difícil. Un programa para dibujar en dos dimensiones (2D) requiere pocas opciones especiales para la arquitectura. No presenta demasiadas diferencias entre unos modos de trabajar y otros. Sin embargo un programa de diseño en tres dimensiones (3D) necesita una especialización más decidida. Difícilmente se encuentra fuera de la arquitectura, por ejemplo, la necesidad de calcular perspectivas cónicas y sombras. Los primeros programas específicos para arquitectura se crearon en universidades británicas pero no quedaban al alcance de la mayoría de los arquitectos.
A mediados de los años ochenta el panorama cambió con la aparición del computador personal (Personal Computer o simplemente PC) de IBM. Supuso la caída de los costes y el aumento de prestaciones que han convertido los computadores en máquinas accesibles y asequibles para el trabajo de los arquitectos. A la máquina lanzada por IBM en 1981 se debe el nacimiento del concepto de “compatibilidad”, que indica que gran cantidad de fabricantes producen modelos de funcionamiento casi idéntico, o “compatible”, lo cual convirtió al PC en un estándar. La compatibilidad, la creciente cantidad de fabricantes y la aparición de diseñadores de programas independientes permitieron la comercialización de gran cantidad de programas de todo tipo.
A mediados de los ochenta se podía afirmar que el dibujo asistido por computador podía ser utilizado por un profesional, tanto por las prestaciones del sistema como por su costo económico. Sin embargo el arquitecto no estaba preparado para el cambio. Aún hoy estamos en el proceso de adaptación del arquitecto a la herramienta informática. Los últimos años han supuesto la aparición de programas cada vez más especializados en la arquitectura, tanto en la automatización del dibujo como para la ayuda al propio proyecto.
El arquitecto ve los resultados impresionantes que el uso de la informática puede ofrecerle (planos, imágenes, videos…). Sin embargo desconoce los recursos necesarios para conseguir estos resultados: automatización de procesos, adecuación al modo de trabajo del programa utilizado, integración de datos… Si decide aventurarse a conocer la herramienta no dispone de la posibilidad del método de prueba y error. Antes de decidir qué método de trabajo se adapta a su método tradicional de proyectar debe decidir el equipo (el medio físico) y el programa (el método de trabajo). Dado que el costo de esta inversión es elevado, un error puede ser fatal. Prueba de ello son los muchos computadores que han permanecido infrautilizados en estudios de arquitectura consolidados que decidieron optar por esta tecnología.
El mercado está esperando nuevas versiones constantemente. El tiempo que transcurre desde que se realiza el invento hasta su comercialización es mínimo. Este ciclo comprimido hace que se programe primero, se utilice después, y se investigue y compruebe en último lugar. Esta tarea la realiza el arquitecto, seguramente sin desearlo y, además, pagando por ello.
Así el arquitecto individual está más al día que la escuela, y la feria comercial presenta más innovaciones que el congreso especializado. Sólo las revistas y las exposiciones pueden estar al tanto de las novedades. Hacer evaluaciones rigurosas de cada sistema o comparaciones entre varios de ellos es complicado. En el tiempo de definir las especificaciones de la prueba, reunir el material y aprender a manejarlo, algunos habrán caído en desuso mientras que otros dispondrán de nuevas versiones con muchas más posibilidades.

Actualmente el computador se está considerando en principio como un simple instrumento para facilitar la labor del arquitecto. Con el computador se pretende realizar el mismo trabajo que antes pero ahorrando tiempo y esfuerzo. En el futuro el medio informático habrá modificado también la cualidad del propio trabajo.
Debemos pasar de utilizar la informática únicamente para la fase de generación del proyecto, a aplicarla a todo el proceso de la construcción del edificio. Desde la concepción gráfica hasta la realización física. No resulta muy difícil pensar que en un próximo futuro en las obras habrá otro computador en el que esté toda la información necesaria para construir el edificio, y que sólo se extraerá en el momento preciso en que sea requerida. Experiencias como el Proyecto Bricc, que se explica en el capítulo cuarto, de aplicación de las nuevas tecnologías al sector de la construcción apuntan en esta dirección.

La mejora de las prestaciones de los programas informáticos ha permitido que el computador sea utilizado tanto como una herramienta de dibujo como una herramienta de apoyo en la génesis del proyecto. Las nuevas tecnologías abren el campo de aplicación del computador a la enseñanza, y a la comunicación y gestión del proyecto.
El ciclo que denominamos real es una situación extrema que era más cierta hace unos años. Los comerciales eran quienes más conocían el computador y los programas informáticos. Ellos formaban a los profesionales que adquirían un determinado equipo. Los estudiantes que realizaban prácticas en los estudios aprendían de los profesionales, y aceptaban plenamente el uso de la informática. Finalmente los profesores de las escuelas eran quienes menos conocían la herramienta informática y en muchos casos han sido los propios alumnos quienes han formado a los profesores.
Este ciclo se está invirtiendo, en muchos casos porque los profesores son a la vez los profesionales que también trabajan en sus estudios, o porque los alumnos pasan a ser profesores. Lo ideal debería ser el ciclo que se muestra en la figura 2.6. Los profesores universitarios deben ser quienes mejor conozcan tanto la herramienta informática como el modo de aplicarla en el auténtico objetivo del docente: el proyecto arquitectónico. Los alumnos deben formarse en las escuelas, y ya como profesionales demandar a los comerciales el producto que mejor se adapta a su modo de proyectar.
Esperar que un comercial nos ofrezca además del mejor y más barato equipo informático, el método para adecuar nuestra forma de proyectar a la nueva herramienta es excesivo para las posibilidades de los profesionales de la venta. Esperar esto último de las academias informáticas tampoco es muy acertado. Quienes forman en estas instituciones, aun siendo generalmente arquitectos, conocen más el instrumento, el programa informático, que el fin, proyectar con computador.
Por nuestra experiencia docente y profesional entendemos que la clave está en la integración del computador en las escuelas de arquitectura. El uso de los computadores como una herramienta de trabajo no es únicamente un cambio de lápiz, ya que supone un cambio en el planteamiento del modo de concebir el proyecto [Madrazo 1992]. Esta idea puede dar pie a muchas investigaciones, pero no es objetivo de la presente. Sin embargo supone una idea esencial en el modo de pensar del investigador, y creemos que se deja notar en la siguiente exposición. Es una realidad que existen posturas encontradas en relación con la informática y su campo de aplicación. Nuestra postura, como repetiremos varias veces en esta investigación, apoya la plena integración.
software imprescindible para un arquitecto



He aquí, más que una simple recopilación, una selección de software imprescindible para un arquitecto o estudiante de arquitectura. 



Llevo algún tiempo probando cuanto programa se me ponga enfrente, analizando sus pros y sus contras. He investigado demasiado software, desde el que usan las empresas especializadas en la visualización arquitectónica pasando por las firmas más importantes a nivel mundial hasta lo que utilizan arquitectos y estudiantes en mi localidad. Además he probado software que no es propio de arquitectura pero que tiene alguna relación con ella. Al final he llegado a las siguientes conclusiones (algunas suenan anticuadas pero tengo que decirlas porque son la realidad):




.La computadora es una gran herramienta y se puede utilizar desde las primeras fases del diseño arquitectónico, hasta la presentación final. 



. Para gustos se hicieron los colores... Existe mucho software, desde el que ayuda a generar ideas y el que te ayuda a hacer bocetos, hasta el que puede hacer recorridos virtuales tan vívidos que se confunden con la realidad. Depende de cada quien la medida en que integra el software a su flujo de trabajo. 


. Si quieres un nivel muy alto de presentación, necesitas mucha preparación y después mucho tiempo para lograrlo. 

Hay programas que aunque no son la primera opción en calidad, su facilidad de uso y por ende, el tiempo que te ahorras con ellos, hacen que sean la mejor opción

El más comercial y el favorito de los que hacen visualización arquitectónica es V-Ray, la verdad produce muy buenos renders. Otra opción es Mental-Ray de 3ds max que también es muy popular y la última versión mejoró mucho respecto de la anterior. Estos son los más populares.







Un motor de render exageradamente fácil de usar es Artlantis. La versión 3 de este mejoró mucho en calidad. Es muy fácil de usar y produce renders aceptables. Un nuevo programa que promete mucho en poco tiempo es Twinmotion 2. Este salió al mercado hace menos de un mes y no he tenido tiempo de probarlo.

 AutoCAD

Da forma a todo lo que le rodea. AutoCAD ofrece la velocidad, la potencia y la flexibilidad necesarias para llevar la documentación y el diseño a un nivel superior.

 Sirve para diseñar y dar forma  a todo lo que le rodea con las funciones potentes y flexibles de AutoCAD® 2013, una de las mejores herramientas de diseño CAD 2D y 3D del planeta. Optimice la productividad con las potentes herramientas para agregación de diseños y documentación, que conectan y agilizan los flujos de trabajo de diseño y documentación. Como AutoCAD 2013 está disponible para Windows® y Mac® OS, puede trabajar de forma nativa en la plataforma que prefiera. Si lo adquiere como un componente de AutoCAD Design Suite, ampliará la potencia de AutoCAD con fáciles flujos de trabajo de comunicación visual.






SketchUp fue diseñado con el objetivo de que pudiera usarse de una manera intuitiva y flexible. El programa incluye en sus recursos un tutorial en vídeo para ir aprendiendo paso a paso cómo se puede ir diseñando y modelando el propio ambiente.
SketchUp permite conceptualizar y modelar imágenes en 3D de edificios, coches, personas y cualquier objeto o artículo que imagine el diseñador o dibujante. Además el programa incluye una galería de objetos, texturas e imágenes listas para descargar.


Mediante SketchUp pueden hacerse arquitectura en tres dimensiones; en la imagen, volumetría de la Catedral de Medellín.
SketchUp fue inicialmente desarrollado por la compañía @Last Software, ubicada en Boulder, Colorado. Su primera versión fue lanzada al mercado en agosto de 2000, con el propósito general de ofrecer una herramienta para la creación de edificios en 3D. Esta herramienta, por su complejidad de imagen y facilidad de uso, fue rápidamente reconocida y premiada.

Este es el primero de una serie de arquitectos que han marcado el desarrollo y la evolución de la arquitectura en El Salvador, espero que esta contribución sea interesante para los foristas centroamericanos y salvadoreños



Vida y obra del arquitecto Armando Sol

El artífice de una ciudad




Se dedicó a diseñar y construir casas y edificios. Su aporte sirvió para dar una imagen diferente a la capital y para revolucionar la arquitectura salvadoreña



¿Quién fue Armando Sol?



Armando Sol fue uno de los primeros arquitectos graduados del país. Realizó sus estudios en la École Saint Luc, de Bruselas, Bélgica.

Él, junto a Ernesto de Sola, quien estudió arquitectura en Estados Unidos, construyó los primeros complejos habitacionales ubicados en las afueras de la capital.

El libro “San Salvador. Historia urbana”, escrito por la antropóloga América Rodríguez, señala que entre 1940 y 1950 el corazón de la capital empezó a crecer. Por ello, los capitalinos de clases media y alta buscaron otras zonas para vivir.
Una entrevista hecha a Armando Sol en 1976, la cual aparece en una tesis realizada por José Pérez y Claudia Salazar en 1994, explica cómo la colonia Flor Blanca se convirtió en un ejemplo vivo del estilo neocolonial.
“A mi regreso al país (1935) había poca influencia arquitectónica. Pero se notaba un pequeño desenvolvimiento, ya que estaban construyendo casas residenciales en la doble vía (alameda Roosevetl)”, relata Sol.
En esa misma entrevista, Sol cuenta que ayudó a terminar la casa de Jorge Pinto, la actual sede del Patronato Pro Patrimonio Cultural.
“A partir de ésa, todos los clientes preferían el estilo colonial. Esta influencia duró bastante en la doble vía. Se hicieron por centenares. Esto duró alrededor de 15 años”, relata Sol.



Artista y diplomático



Armando Sol fue un amante de diversas expresiones del arte. Su sobrina María Elena Sol dice que sus primeros pasos fueron en el dibujo.

Según una entrevista hecha por Pérez y Salazar a Teresa Sol, hermana menor del arquitecto en cuestión, Armando aprendió a dibujar desde niño.

Ella relata que su madre lo llevaba a la iglesia El Carmen de Santa Tecla. Y mientras ella estaba ocupada en las actividades religiosas, el pequeño recibía clases de dibujo con un cura.
Ya como profesional, Sol tomó un curso de dibujo en Oviedo, España, y se perfeccionó con los consejos del pintor y arquitecto español Joaquín Vaquero.
María Elena dice que “El Tríptico”, una serie de dibujos que integra todas las joyas arquitectónicas de Europa, Asia y África, es una de sus mejores obras.
Esa habilidad también se evidenciaba en los planos arquitectónicos, los cuales fueron hechos a lápiz y tinta china.




Obras arquitectónicas de Armando Sol






0. Centenares de casas en las colonias Escalón, Flor Blanca, San Benito, San Francisco, Layco, barrio San Miguelito, sobre 1a. y 3a. calles poniente y alameda Roosevelt.

0. Proyecto arquitectónico de Jardines de Guadalupe, Antiguo Cuscatlán.

0. Centros comerciales: La Mascota, Jardines de Guadalupe, Plaza Orleans y Plaza Real.
0. Edificios: oficina de CAESS (actualmente sede de una AFP) y la Bayer (sobre la calle El Progreso).
0. Casas de personalidades: residencia de la familia Murray Meza (ahora parqueo de un banco en la avenida Senda Florida), casa de Jorge Pinto (actual sede del Patronato Pro Patrimonio Cultural) y residencia de Margarita Morán Guirola (conocido como “el Castillo Venturoso”).
0. Centros de entretenimiento: remodelación del Club Salvadoreño, construcciones del Casino Salvadoreño (4a. calle oriente y 4a. avenida sur), el Casino Santaneco y el Casino Tecleño.
0. Iglesias: capilla de la colonia San Benito.
Colaboración en la construcción del aeropuerto de Ilopango.





Vida de un artista



0. Armando Sol nació en Santa Tecla el 14 de octubre de 1909.

0. Su educación media la realizó en el Instituto Nacional de San Salvador. Allí obtuvo el título de bachiller en Ciencias y Letras en 1928.

0. Sus estudios universitarios los inició, en 1929, en la École Saint Luc en Bruselas, Bélgica.
0. Realizó un curso sobre el uso del concreto armado en Madrid, España, en 1934.
0. En 1936, se reincorporó como profesional a la Universidad de El Salvador (UES) para que su título fuera reconocido en el país.
0. En la UES fue nombrado como miembro del Consejo Superior Universitario. Y fungió como catedrático.
0. En 1943, se casó con Gilda Trujillo Noltenius.
0. Su carrera diplomática comenzó en 1944 como agregado cultural de El Salvador en París, Francia.
0. En 1951, fue nombrado cónsul honorario de Bélgica en El Salvador. Y fue honrado por el rey Balduino con la condecoración “Chévalier de L' Ordre de la Couronne”.
0. Entre 1957 a 1960 fue embajador de El Salvador ante Venezuela e Italia.
0. Luego de servir como embajador fue nombrado ministro plenipotenciario y enviado extraordinario en Israel.
0. En 1976 fue elegido por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (España) como académico correspondiente en el país.
0. Falleció en San Salvador el 6 de mayo de 1983.
Fuente: “Armando Sol, inventario, valorización y lineamientos museográficos enfocados a su colección de planos y dibujos”, tesis de Víctor Manuel Rivas y Tatiana Cruz, Universidad Albert Einstein.